Nuestro pueblo
Somos gente del campo.
Para nosotros ir al campo y disfrutar del paisaje siempre ha sido un regocijo. En recientes años esos campos, que tanto nos llenan de orgullo, han comenzado a llenarse de basura, bolsas plásticas, pañales, llantas y hasta cascajo.
Entre el paisaje pueden apreciarse las terrazas de cultivo hechas de cercas y bardas de piedra, los tecórbitos, los teocholes y árboles. ¿Los has visto?.
Muchos desconocemos que ese paisaje con cercas de piedra es especial y que posee valor arqueológico, se trata de tecnología avanzada en armonía con el medio ambiente que nuestros antepasados desarrollaron.
Por eso hemos salido al campo a tomar fotografías para que puedas apreciar su belleza desde otra perspectiva.
Niño milpaltense pasea en bicicleta en el camino cercado que lleva a los capos de cultivo de nopal en Milpa Alta.
El paisaje cultural de Milpa Alta sigue vivo gracias al trabajo de los campesinos que lo cuidan y embellecen con sus cultivos.
Nos intriga que en Milpa Alta no existan proyectos arquitectónicos en armonía con nuestro paisaje cultural, no se aprovechan los terrenos ni su valor arqueológico, al contrario, se depredan, se aplanan con cascajo y se hacen cubos de tabique y tabicón.